Ladrones modernos: robando a las casas de seguros.

No se trata de chicos de trece años «distrayendo» dulces de un supermercado. Se trata de una práctica generalizada en la sociedad: quedar de acuerdo para engañar al seguro. Eso, en una conciencia recta, que busca acomodarse a la verdad, se llama robo. Lo demás es forzar la conciencia para acomodar las circunstancias…
Como decía el malogrado Freddie Mercury: «Las cosas que uno hace por dinero…»

Lee el ejemplo gráfico de deshonestidad…

Finge un  tirón para recuperar el dinero que su novio se gastó en varios club alterne

La detenida interpuso una denuncia falsa para cobrar la indemnización del seguro y recuperar así del dinero que su novio se gastó en varios establecimientos de alterne. La Guardia Civil informó de que la falsa víctima les relató «con todo lujo de detalles» cómo ocurrió el «falso» robo. Según esta mujer, M.P.D.R. de 40 años, los ladrones se llevaron dos monederos, unas gafas de sol, las llaves de la casa, un móvil y una tarjeta de crédito.
Las primeras pesquisas se centraron en el recorrido que hizo la tarjeta y se llegó a saber que se usó en cuatro ocasiones después de ser denunciada como robada. Luego, se fueron haciendo gestiones para saber dónde se utilizó la tarjeta y poder coger así algún hilo para llegar hasta el supuesto ladrón. La tarjeta de crédito se usó en un piso céntrico de Sevilla que funciona como club de alterne.
Al final, fruto de estas pesquisas, la Guardia Civil ha llegado a saber que, supuestamente, fue el novio de la supuesta víctima quien utilizó la tarjeta de crédito y que su propietaria puso la falsa denuncia para recuperar lo gastado en el club de alterne y por celos. Estas circunstancias han hecho que el Instituto Armado detenga a M.D.P.R. por la falsa denuncia de este robo.