«Balada de Amor»

– Llaman a la puerta, madre. ¿Quién Será?
– Es el viento, hija mía, que gime al pasar.
– No es el viento, madre. ¿No oyes suspirar?
– Es el viento que al paso deshoja un rosal.

Continúa el poema…

– No es viento, madre. ¿No escuchas hablar?
– El viento que agita las olas del mar.
– No es el viento. ¿Oíste una voz gritar?
– El viento que al paso rompió algún cristal.
– Soy el amor -dicen-, que aquí quiere entrar…
– Duermete, hija mía…, es el viento no más.

Francisco Villaespesa