No hablar de cosas verdes (basta de procacidad)

Los chistes verdes, los programas guarros (o rosa, más light), los contenidos pornográficos de internet, móviles, kioskos, las despedidas de soltero, las actitudes promiscuas en las discotecas de moda, la total desinhibición en las parties (la pregunta de moda, antes de apretar el trasero al contrario: ¿quieres rollo?) son tristemente comunes en una gran parte de la juventud (y en la sociedad española en general). Señoritos de la vista baja, les llamaba a veces aquel santo de Barbastro…

Debiéramos acordarnos de las palabras de San Pablo: que la impureza no se nombre
entre vosotros
. También, comentando esta idea de San Pablo, decía San Josemaría,
que es más pegajosa que la pez (especie de alquitrán negro con que se asegura que los
barcos no tengan vías de agua).

Un ejemplo de «pegajosidad» divertido…

Rescatan a un anciano tras quedarse pegado en el techo de su invernadero

.- Un alemán de 91 años de edad fue rescatado el martes por la policía y los bomberos de una situación sumamente pegajosa.

El jubilado, que vive en la ciudad oriental de Magdeburgo, trató de aprovechar un día primaveral para verter una nueva capa de alquitrán en el techo de su invernadero cuando se resbaló y quedó pegado a la estructura.

Las cuadrillas de rescate lograron liberar al hombre del alquitrán arrancándolo lentamente de la pegajosa mezcla.

Las autoridades dijeron que el hombre, cuyo nombre no fue divulgado, fue rescatado ileso, pero que sus ropas quedaron totalmente destrozadas.
Fuente: AP

13-03-2007