Conocer las cualidades es fundamental para decidir.

Un formador (un familiar, un directivo) debe poner cada pieza en su sitio, atendiendo a las cualidades y buscando no sólo la armonía -la paz del claustro o bien común- sino el bien individual. Por eso el conocimiento del individuo, de sus destrezas y de sus puntos débiles es fundamental a la hora de tomar decisiones de estructura. Luego una persona (en una empresa, en un colegio, en una familia…) agradece tremendamente que le valoren: que le comprendan y le ayuden a hacerse eficaz, lo más útil posible. 

He aquí una historia real del Gigante que supo usar su gran talla…

Hombre más grande del mundo salvó a delfines enfermos en insólita operación

Veterinarios del parque oceánico Fushun recurrieron a Bao Xishun, un pastor de Mongolia que mide 2,36 metros, para que con sus extremidades de 1,06 metros retirará los plásticos tragados por los mamíferos.

Los cuidadores de un parque oceánico chino recurrieron al hombre más alto del mundo, según el Libro Guinness, para que introdujera su brazo en el estómago de dos delfines que ingirieron fragmentos de plástico de su piscina, informó hoy la agencia Xinhua.

Los dos delfines enfermaron hace dos semanas al tragar accidentalmente fragmentos de plástico del borde de la piscina donde suelen hacer sus acrobacias.

Los veterinarios del parque oceánico Fushun, en Liaoning (noreste), practicaron sin éxito una intervención quirúrgica, y pensaron que tendrían que extraer los plásticos con un objeto alargado capaz de atraparlos, por lo que decidieron recurrir a otra solución menos convencional.

Los expertos localizaron a Bao Xishun, un pastor de Mongolia Interior que con sus 2,36 metros entró el año pasado en el Libro Guinness de los Récord como el humano más alto del mundo.

El gigante, guiado por los veterinarios, introdujo uno de sus brazos -de 1,06 metros- por la boca de los mamíferos y consiguió llegar hasta el estómago, sacar los fragmentos plásticos y salvar la vida de los delfines, según muestran las fotografías de Xinhua.

«Todavía quedan pequeños trozos de plástico, pero ahora los delfines podrán digerirlos y esperamos que se recuperen pronto», apuntó Zhu Xiaoling, uno de los veterinarios del acuario.