Sólo Dios da la vida, pero tú has de transmitirla y respetarla.

Sólo Dios puede dar la fe, pero tú puedes dar tu testimonio.

Sólo Dios puede dar la esperanza, pero tú puedes devolverla a los demás.

Sólo Dios puede dar el amor, pero tú puedes amara tus hermanos.

Sólo Dios puede dar la paz, pero tú puedes sembrarla a tu alrededor.

Sólo Dios puede dar la fuerza, pero tú puedes animar también.

Sólo Dios es el camino, pero tú puedes enseñarlo a otros.

Sólo Dios es la luz, pero tú puedes hacer que brille para todos.

Sólo Dios puede hacer lo imposible, pero tú puedes hacer lo posible.

Sólo Dios se basta a sí mismo, pero prefiere contar contigo.

Tomado de “Poemas para orar” B.A.C.

Vicente Huerta