MIRAR EL CIELO Y LA TIERRA

Un astrónomo salía de noche a observar las estrellas. Una vez, cuando estaba absorto viendo el firmamento, no miró dónde ponía los pies y acabó en una zanja.

Uno que pasaba oyó sus gritos y corrió a sacarlo.

¿Cómo quieres descubrir lo que hay en el cielo si no eres capaz ni de ver lo que tienes ante tus narices?