No sabemos cuáles son los planes de Dios: sólo que Él está contando continuamente con nosotros para impulsarlos. Vino ya mayor al cole y de una familia cuidadosa con la formación humana, en Madrid. El chico se encontró con Dios de lleno y pasó a recibir los sacramentos y a practicar su fe. Sin estridencias, su corto paso por el Colegio -dos años- dejó en su vida lo que le faltaba: la fe. Murió hace muy poco en un accidente de coche, al salirse de la carretera y caer por el terraplén de la vía del tren. Iba bien y sereno; acababa de sacarse el carné. Alguien, un amigo suyo, en el funeral comentó que unos días antes le había referido un problema y que éste le aconsejó confesarse, cosa que hizo durante el funeral.