ESPERABAN QUE LES RECOGIERA…OTRO
Responsabilidad en Apostolado y evangelización
Si no eres tú, entonces ¿quién?

En la Vuelta a Tabarca, una regata de Alicante, hubo un naufragio de una embarcación con dos regatistas. Aparte de que no llevaban salvavidas, que, aunque facilitaba enormemente los movimientos estaba en contra de las reglas, se habían metido por unas agujas de coral, para acortar, expresamente prohibidas por la Organización. Así que iban los primeros en su carrera loca cuando encallaron y se hundieron.
Sigue la anécdota verídica…

 Los otros regatistas, que vieron lo sucedido, pasaron a su lado sin ayudarles pensando que el tiempo era bueno y que, como eran tantos participantes en la regata, ya habría álguien que les recogiera.
Lo cierto es que al ratito de que pasaran todos (los últimos pensando que la Organización haría algo) los dos náufragos se ahogaron.