Otra anécdota de agradecimiento…

AGRADECIMIENTO.-
UN VIEJO RESPONDE A UN MUCHACHO

  

 
Un
muchacho se quejaba un día a Dios y le decía:

Señor,
tú has hecho ricos a todos los demás, mientras que a mí no me has da­do nada.

Un
viejo, que escuchaba sus quejas, le dijo:
 

 
‑ ¿Eres tan
pobre como crees? ¿No te ha dado Dios juventud y salud?
 
 
‑ Sí, es
verdad, y me siento orgulloso de ello, dijo el muchacho.

Entonces el viejo le tomó de la mano y le
dijo:


‑ Si te
diese diez mil euros, ¿te dejarías cortar la mano derecha?

‑ ¡Ni
hablar!

‑ ¿Y la
izquierda?


– Tampoco!


‑ ¿Y si
te diese un millón, te dejarías quedarte sin vista?


‑ ¡No lo
permita Dios! Ni por una fortuna daría uno de mis ojos.



Entonces, ¿de qué te quejas?, le dijo el viejo. 


¿No ves la inmensa fortuna que
Dios te ha regalado? Pues vete, y no seas desagradecido.