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Resultados de la búsqueda para: SANTO DOMINGO DE GUZMÁN
Todo el encanto que las vidas de santos han ejercido y siguen ejerciendo en nuestros pequeños lo ponemos ahora a disposición de padres, familiares y educadores para no perder este eficaz instrumento de catequesis infantil. He aquí, pues, unos relatos biográficos con textos muy medidos, pero con desmedidas ilustraciones a todo color. Unos libros preciosos, donde todo huele a chico: sus tapas coloristas, pero duras, para que duren. La lista de títulos que crece como crecen ellos. Y sobre todo, su precio, tan enano como sus lectores.
Un año más, desde 1997, Edibesa pone al servicio de sus lectores y de todos los cristianos el evangelio de cada día con el texto litúrgico oficialmente correspondiente. Se presenta en el doble formato: edición de bolsillo y letra grande. Como novedad, este año aumenta el número de páginas, dedicando una para cada día del año. Mantiene la impresión a cuatro colores, lo que le distingue de otros de la competencia en calidad. Y mantiene el mismo precio del año pasado. Se sigue la estructura diaria de años anteriores con los apartados siguientes: Mundo, Fe, Texto litúrgico del evangelio de cada día (los domingos con las tres lecturas) y Oración final. El libro tiene como anexos: Índice de santoral, Oraciones y vida cristiana, Calendario litúrgico y el Catálogo del fondo editorial Edibesa. En el Año de la Nueva Evangelización Edibesa pone a disposición de sus lectores este elemento sencillo pero de profunda influencia espiritual y evangelizadora.
"La utopía evangélica del Reino debe iluminar, dinamizar y juzgar, nuestra realidad dominicana. Un Reino de Dios, personificado en Cristo, que nos revela la lógica, la voluntad y la belleza de Dios. Un Reino de Dios que, a las realidades humanas heridas, el Padre las recrea en fidelidad a su proyecto creacional. Aquí radica el esencial evangélico que nos revela y actualiza Cristo Jesús. En fidelidad a santo Domingo, estamos llamados a contemplar ese "esencial evangélico", a profundizar en el estudio, a celebrarlo en la liturgia, a encarnarlo en nuestra pobreza, obediencia y castidad" Fray Emilio Barcelón M., O.P.