Europa del Sur



PARAÍSO CERRADO, JARDÍN ABIERTO
Este es un libro sobre el imaginario sagrado de la naturaleza vegetal en la Antigüedad que se asoma a diversos ámbitos del Próximo Oriente y del Mediterráneo. Historiadores y filólogos nos introducen en los secretos de las plantas, desde los herbarios de la antigua Mesopotamia o los jeroglíficos y narraciones míticas de Egipto, al árbol bíblico de la conciencia del 'Génesis' o al ámbito heroico y arbóreo en la antigua Grecia y sus viejos dichos. Hollamos los jardines de iniciación de jóvenes semejantes a flores y los paraísos de ultratumba cuidados por Eros, servidor del amor y de la muerte. Los arúspices y sus técnicas de adivinación conducen por los recovecos de la mántica etrusca y las normas estrictas sobre la fabricación de pastelillos para los rituales sacerdotales de Roma. El libro trasciende el marco de la Antigüedad y cruza la Edad Media y la Época Moderna. La técnica de los injertos muestra al Dios-Jardinero del cristianismo y, ya en el huerto islámico, el uso narcótico del cáñamo evoca el misticismo sufí. Al Renacimiento y al Barroco pertenecen el conocimiento y la magia heredada de la hechicera Hécate, mientras que el Siglo de las Luces y el primer romanticismo se debatirán entre la taxonomía botánica de Linneo y la desvelación de la naturaleza sagrada de Goethe. No se olvidan los paisajes imaginarios construidos desde la ensoñación y el deseo, como la feliz Arcadia, de idílicos valles, ni los usos medicinales y mágicos de las plantas que conserva el acerbo popular por los diversos rincones de España.

COOPERACIÓN TRANSFRONTERIZA ANDALUCÍA-ALGARVE-ALENTEJO (MÁRQUEZ DOMÍNGUEZ, JUAN ANTONI/GORDO MÁRQUEZ, MERCEDESED. LIT/CONGRESO DE CIENCIA REGIONAL D)
La estructura territorial de Europa permite y ampara regiones de geometría variable, algunas emergentes como la que pudieran formar Andalucía – Algarve – Alentejo. Estas regiones bajo la cooperación transfronteriza tienen el desafío de desactivar “la raya”, una frontera largamente fraguada con contradicciones entre los intereses de los poderes estatales y locales. Pero no es fácil, porque la segmentación y despoblación rayana originó un espacio desarticulado y ultraperiférico, con escasez, cuando no ausencia, de inversión pública y privada y una economía primaria, carente del suficiente nervio para sustentar procesos de desarrollo y evitar la emigración. Por suerte, a partir de la incorporación de España y Portugal a la Unión Europea en 1986 y la llegada del Mercado Único en 1993, se ha ido creando un ambiente de cooperación transfronteriza, impulsado por fondos estructurales e iniciativas y programas Comunitarios. Esta cooperación ha permitido redescubrir el territorio de la frontera como un hecho habitual, donde existen oportunidades de ocio y negocio. Para conocer la cooperación transfronteriza y reflexionar sobre esta realidad regional, que algunos quieren llamar eurorregión, durante los días 10 a 12 de diciembre de 2009 se celebró en la Universidad de Huelva el XI Congreso de la Asociación Andaluza de Ciencia Regional, que tuvo como lema la Cooperación transfronteriza Andalucía - Algarve - Alentejo.