“No estás aquí para vivir de forma mediocre, estás aquí para ser feliz. Depende sólo de ti” La vida nos muestra continuamente una danza frenética en la que todo evoluciona y se transforma en esta gran obra que es el mundo. Pero más allá de este espectáculo de luces y colores, es posible advertir un mismo patrón de comportamiento de toda forma. Ahí empieza el juego, que no es otro que el de advertir la unicidad en todo. ¡Somos Dioses! Pero el ser humano en general no sólo muestra un paupérrimo potencial del que atesora, sino que ignora completamente hasta dónde puede llegar. No estás aquí para vivir de forma mediocre. A pesar de todo lo aparente, estás aquí para ser feliz. Ése es tu estado real. Y depende exclusivamente de ti. De querer recordar. De querer Ser. No te conformes con menos. ¿Estás listo para ello? Claro que sí. Después de todo, sino no estarías leyendo estas líneas.