La expedición de los almagristas a Chile tuvo como resultado principal la conquista y la fundación del Reino de Chile por parte de Pedro de Valdivia en 1541. Esta expedición fue liderada por Diego de Almagro, quien buscaba expandir el territorio del Imperio español hacia el sur. A pesar de enfrentar numerosos desafíos y conflictos con los indígenas mapuches, los almagristas lograron establecer una presencia española en la región, sentando las bases para la colonización y posterior dominio español en Chile. Sin embargo, la expedición también generó tensiones y rivalidades entre los conquistadores, especialmente entre Diego de Almagro y Pedro de Valdivia, que finalmente desembocaron en conflictos internos y guerras civiles en el período conocido como la Guerra de Arauco.