“Puesto que la oración es una petición de los bienes de los cuales el Verbo Encarnado es autor, avancemos con confianza, desnudando cuidadosamente por la contemplación, tanto cuanto es posible para nosotros, el sentido de cada palabra”.

(Máximo el Confesor, Interpretación del Padre nuestro. Sobre las disposiciones para rezar el Padre Nuestro y cualquier oración vocal)