Querido hijo,

En esta Navidad, tus compañeros de trabajo y amigos se reúnen con profunda nostalgia y amor en memoria tuya. Los recuerdos que compartieron contigo brillan como estrellas en esta temporada especial.

Cada adorno, cada sonrisa, trae a la memoria los momentos inolvidables que compartieron contigo. Hablan de ti con cariño y gratitud por tu amistad, tu dedicación y tu espíritu apasionado.

Tu presencia sigue siendo fuerte entre ellos. Recuerdan tus risas, tus historias, y la pasión que ponías en cada proyecto y cada momento de compañerismo.

En esta Navidad, en tu memoria, tus compañeros y amigos te honran con cariño y gratitud por la huella imborrable que dejaste en sus vidas. Tu legado de amistad y profesionalismo perdura en sus corazones.

Con amor eterno.