• Tener cuidado con los adjuntos en el correo electrónico.
  • Actualizar el software del sistema operativo periódicamente.
  • Utilizar mejores contraseñas y cambiarlas cada cierto tiempo.
  • Usar antivirus y aplicaciones anti-malware.
  • Cerrar las sesiones al terminar cualquier operación en una web.
  • Evitar realizar operaciones privadas en redes abiertas y públicas.
  • Activar el Firewall del sistema.
  • Evitar software poco conocido.
  • Realizar copias de seguridad.