Llegas a Berlín y te alojas en un hotel cerca de la Puerta de Brandenburgo. El primer día, decides visitar el monumento más icónico de la ciudad, el Muro de Berlín. Te detienes en Checkpoint Charlie, un antiguo punto de control de la frontera entre las dos Alemanias durante la Guerra Fría.

Después, visitas el Museo de la Guerra Fría, donde puedes aprender sobre la historia de la división de Alemania y la vida cotidiana en la antigua República Democrática Alemana.

Por la tarde, te diriges a la isla de los Museos y te pierdes en el Museo Pergamon, que alberga artefactos antiguos de la antigua Mesopotamia, Grecia y Egipto.

El segundo día, decides explorar la antigua Berlin-Oeste. Visitas el puerto de Friedrichstraße, donde puedes admirar los antiguos edificios y los puentes sobre el río Spree. Después, vas a Potsdamer Platz, el corazón de la nueva Berlín, donde puedes disfrutar de la vida nocturna y ver algunos de los edificios más modernos de la ciudad.

Por la tarde, te diriges al barrio de Kreuzberg, donde puedes disfrutar de la comida turca y caminar por sus animadas calles.

El tercer día, decides visitar la icónica Torre de Televisión de Berlín, donde puedes subir a la cima y tener una vista panorámica de la ciudad. Después, te diriges a la Alexanderplatz y visitas la Torre de la Televisión de Berlín, que alberga un centro comercial y un mirador con vistas impresionantes de la ciudad.

Antes de partir, decides visitar la Columna de la Victoria, un monumento en honor a los caídos de la Segunda Guerra Mundial. Te detienes en el monumento para reflexionar sobre la historia de Berlín y su evolución como una ciudad vibrante y cosmopolita.