En Valencia, la fiesta no puede faltar, y como es natural, a su Madre reverenciar…

Anécdota de Valencia

LA OFRENDA
 
En la ofrenda fallera
las calles repletas
de gente en sus aceras
contemplando la hermosura
y también su galanura
de la fiesta fallera
 
Con sus ramos de flores
de vistosos colores
desprendiendo sus olores
las mujeres huertanas
por las calles valencianas
desfilan jóvenes ufanas.
 
Los niños son un encanto
cuando están desfilando
por la calle medio jugando
provocando la sonrisa
de las personas que admiran
la inocencia de sus vidas
 
La música acompaña
llenando las entrañas
de personas propias y extrañas
animando las fiestas
la comisión con sus cestas
y las falleras dispuestas
 
Para a la Virgen ofrendarle
y con su corazón entregarle
su ramo de flores presentarle.
No hay fiesta que no se precie
y que con su Madre no cuente
Y venga a reverenciarle.