Hace ya unas décadas, Karl Rahner hablaba de la revelación como un acto de comunicación de Dios. Hoy vivimos la era de las comunicaciones, y en este maremágnum de mensajes cruzados, de debates sin argumentos, de crispación política y de confusionismo, todos necesitamos ponernos a la escucha. La XXVII Semana de Teología Pastoral quiso ser un acto de escucha de la Palabra de Dios, que se vuelca a los hombres y mujeres de múltiples modos.