Pretende ayudar a los docentes a conocer cuáles son las potencialidades y necesidades de estos alumnos, teniendo en cuenta las dificultades que el trastorno les genera en su forma de aprender y relacionarse. Se aportan recomendaciones, sugerencias y estrategias para llevar a cabo una intervención que facilite las condiciones adecuadas para conseguir su máxima integración personal y social posible. Asimismo plantea también una intervención global en colaboración con la familia y otros profesionales que atienden a estos alumnos fuera del contexto escolar.