El coach escolar es una persona formada conceptual y prácticamente, que ha demostrado eficacia en sus funciones (es un experto), tiene un espíritu de pionero y no solo de colono, propone la formación teórica después de las necesidades que plantea el enfrentamiento a retos concretos, hace pensar estratégicamente según las situaciones que se van a vivir y acompaña sin absorber ni suplir. El sistema de coaching implica en el formador una experiencia actualizada y documentada en los procesos que asesora, un conocimiento profundo de los resortes conductuales, estilos de aprendizaje y respeto a los ritmos de vida. La persona formada en este enfoque tiene como característica inicial la fortaleza para desaprender patrones rígidos y psicoescleróticos, además de profunda humildad para aprender y cuestionar.