El Bosquejillo de José Mor de Fuentes (1836) constituye un excepcional documento de la segunda mitad del siglo XVIII y del primer tercio del XIX. Su autor, testigo excepcional de la época, escribió una autobiografía que da cumplida noticia de muchos hechos históricos que conoció de primera mano y ofrece una interesante visión de la cultura coetánea. Con un estilo muy vivo, «próximo a la acción», Mor compromete sus opiniones con juicios que rompen algunos tópicos repetidos en los manuales y ofrece revelaciones sorprendentes: luchas fratricidas entre banderías literarias, intereses inconfesables y odios viscerales.