Cartas en la noche nos invita a acercarnos a una joven creyente, Isabel Méndez Herrero (1924-1953), testigo del Evangelio y apóstol desde la inacción, en medio de un mundo reducido y sin horizontes. Su experiencia religiosa evoca a Teresa de Jesús y Juan de la Cruz, dos místicos que compartieron con ella profundas raíces cristianas y el amplio espacio vital de Castilla.