Grupos sociales



EL DESAFÍO DEL FORO SOCIAL MUNDIAL
El Foro Social Mundial permite la experimentación de una práctica política coherente con el tipo de sociedad, igualitaria y democrática, por la que luchan todos los que hoy se oponen al neoliberalismo. Irrumpió en el escenario como un viento nuevo, que asumió la horizontalidad de las estructuras en red y afirmó la presencia de la sociedad civil en la acción política. Este reencuentro con la utopía es para Chico Whitaker la razón más profunda del éxito del Foro Social Mundial. El gran desafío que el Foro enfrenta hoy es el de continuar cumpliendo su papel de “espacio abierto”, al servicio de la lucha de la sociedad para que prevalezca, en todas partes, la justicia social, la solidaridad y la paz. A través del relato de la historia del Foro Social Mundial, visto desde dentro –desde la gestación de la idea, las dificultades encontradas, las perspectivas que se abrieron, los pequeños episodios vividos durantes este camino-, este libro ofrece una visión amplia y clara de las múltiples dimensiones de esta iniciativa, que rápidamente se ha convertido en la mayor novedad política de los últimos tiempos. Chico Whitaker (1931) ha representado en el Comité Organizador del Foro Social Mundial, la Comisión Brasileña Justicia y Paz. En la década de 1950 fue militante de la juventud de la Iglesia Católica en Brasil. Formado en arquitectura, trabajó en planificación urbana y regional, fue director de Planificación de la SUPRA, organismo federal encargado de la reforma agraria en Brasil. En 1966 tuvo que exiliarse durante quince años. De vuelta a Brasil fue asesor del caaardenal arzobispo de Sao Paulo, fue concejal por el PT durante dos legislaturas, en la Cámara Municipal de Sao Paulo, y de 1996 a 2003 asumió el Secretariado de la Comisión Brasileña de Justicia y Paz.

CIUDADES EN DESARROLLO
Desde finales de los años sesenta el tercer mundo vive una verdadera revolución urbana cuyas consecuencias son considerables y frecuentemente dramáticas. Esta revolución transforma profundamente las relaciones entre la ciudad y el campo, la habilitación del territorio, las estructuras familiares, los modos de habitar, los comportamientos sociales... Este libro no constituye un cuadro de las buenas o malas políticas urbanas. Establece la lista de las preguntas que es preciso plantearse, de los debates que se deben organirzar y de las decisiones que hay que tomar para tratar con la ciudad entera, sin exclusión ni exclusividad. Evocando numerosos casos, africanos en su mayoría, los autores responden a las expectativas de los expertos y de quienes ejercen la habilitación urbana, a la vez que le presentan al público más amplio las posibilidades y las restricciones (en cuanto a buenes raíces, urbanísticas, arquitectónicas, etc.) que se hallan vinculadas con este fenómeno irreversible y de dimensiones mundiales: la urbanización.