¿Péguy, el insurrecto? Bajo las diversas formas del capitalismo, de la burguesía, del cientificismo, del imperialismo, del clericalismo, de la enseñanza elitista y de las ideologías-culturales, se fragua una misma empresa, característica de lo que Péguy llama «el mundo moderno»; y que tiende a degradar al hombre, a envilecerle y a someterle, en su trabajo, su libertad, su vida. Desde sus años de estudiante, Péguy se rebela contra esta condición del hombre moderno; apasionado, irreductible, temible, ataca en todos los frentes: socialismo, cristianismo, nacionalismo, cultura... Péguy es uno de los grandes escritores desconocidos en España. No son pocos los que hablan de él, pero casi siempre como uno de esos escritores a los que se cita sin haberles leído. O cuando menos sin haberle conocido a fondo. Y, sin embargo, todo hace pensar que Péguy ha de encontrar una extraordinaria resonancia en el meridiano de nuestra cultura. Péguy es radicalmente contemporáneo nuestro y ya es tiempo de redescubrirle en su contundente modernidad.