Una fecha, un nombre y un enigma: 12 de octubre de 1492. Cristóbal Colón, sin saberlo, protagoniza uno de los acontecimientos más importantes de la historia. Tras su llegada a América ya nada será igual en el mundo. Quinientos años de historia repiten machaconamente una leyenda tan poco fundamentada como absurda: el misterioso e intrépido marino Cristóbal Colón muere en 1506 sin haber comprendido realmente dónde desembarcó. Ha llegado el momento de reconsiderar esta versión de los hechos unánime para desmentirla definitivamente o darle la vuelta como a un reloj de arena... el instrumento que medía el tiempo para los hombres entregados al mar. Para que, como escribe el mismo Colón, «la Verdad triunfe siempre» y «yo no quede confundido eternamente». La historia de un descubrimiento revolucionario, más decisivo aún que el primer viaje a América: Cristobal Colón era hijo del Papa Inocente VIII y conocía perfectamente el destino de su viaje… RUGGERO MARINO es periodista, escritor y poeta. Durante más de treinta años fue reportero especial para el periódico Il Tempo, viajando a más de cincuenta países en paz y en guerra. Galardonado con diez premios por su labor periodística, en 1991 gana el Premio Scanno con su primer libro Cristoforo Colombo e il Papa Tradito. Lleva más de quince años estudiando a Cristóbal Colón y, sus teorías, más que polémica suscitan admiración y respeto, como lo demuestran las frecuentes conferencias que imparte en la Accademia dei Lincei y el hecho de ser miembro de la comisión científica que, desde Nueva York, organiza las celebraciones anuales de Colón en ocasión de la fecha mítica del descubrimiento de América: el 12 de octubre.