La lectura de este libro evitará caer en un error muy extendido entre los devotos de Santa Gema: que ciertamente es admirable y muy generosa en las gracias y favores que consigue de Dios para los que la invocan y a ella se encomiendan; pero pocos son los que, además y sobre todo, la ven como un modelo con el que Dios ha enriquecido a su Iglesia. Fue canonizada y tiene tanta influencia ante Dios, no por los fenómenos sobrenaturales que vivió, sino por sus muchas y grandes virtudes; y en esto podemos imitarla y esta debería ser nuestra verdadera devoción a Santa Gema.