Los títulos conseguidos por Pep Guardiola en cuatro años encabezando el primer equipo del F.C. Barcelona demuestran que ha sido, hasta su despedida, un líder excepcional, con unos valores sólidos que sabe transmitir: esfuerzo, autoexigencia, trabajo bien hecho, espíritu de equipo y mucho sentido común. Estos valores lo acreditan como el mejor entrenador del mundo y a la vez convierten al Barça en un modelo triunfador de fútbol con ética y estética, uno de los mejores equipos de la historia, con su prodigioso goleador Lionel Messi al frente.