Son muy pocos los libros de caza que tienen la calidad literaria de éste, a pesar de que en España la literatura cinegética es relativamente abundante. Encontramos una cruda descripción de las estrecheces que se vivieron en la España rural de la posguerra, un canto a la sabiduría popular y una exhibición de sapiencia venatoria. Todo ello a través de la historia de su protagonista, Juan Lobón, que dice de sí mismo: "Soy cazador cómo soy moreno".Se trata, pues, de un cazador de nacimiento, extraordinariamente dotado para serlo, cuyo conocimento del medio hoy nos resulta asombroso. Juan Lobón fue uno de los últimos cazadores para los que conseguir una pieza era cuestión de supervivencia y no un deporte, como había venido siendo para los hombres durante millones de años. Este libro es la aventura apasionante de un hombre libre y de su lucha contra la naturaleza y, más aún, contra las leyes de los hombres.