La ternura es uno de los rasgos más característicos del papa Francisco y, sin duda, uno de los que más conmueven e interesan a los fieles. El papa de la ternura relata trece manifestaciones conmovedoras del afecto del papa con distintas personas: una prostituta esclava nigeriana liberada, las madres jóvenes de una cárcel de mujeres en Santiago de Chile, los refugiados rohinyás en Bangladesh o las víctimas de abusos sexuales; episodios de afecto que han llamado la atención de la autora mientras acompañaba al pontífice en sus viajes internacionales o durante sus actividades en Roma.