Centrada en Roma poco antes de la Primera Guerra Mundial, El velo de Verónica describe el itinerario espiritual hacia la conversion al catolicismo de una joven alemana, Verónica, que narra en primera persona lo sucedido. En la obra, Verónica describe los acontecimientos de su adolescencia, que cambiarán por completo su vida, relacionados con hechos que son esenciales también en la vida de los que la rodean: su entorno familiar y un joven alemán, Enzio, recién llegado a Roma. El medio en el que Verónica se desenvuelve, de elevado nivel cultural y económico, permite a la autora presentar de modo magistral el pensamiento y el arte de la cultura occidental contemporánea, con todos los temas y graves dificultades de la historia de este período. Por su prosa brillante, cargada de lirismo, esta obra es uno de los grandes monumentos de la literatura europea contemporánea.