Antes de distanciarse críticamente frente a la Iglesia medieval, hay que comprender las circunstancias en las que se anunció y vivió la salvación y se incorporó a unas estructuras socialmente relevantes. Es decir, hay que entender los hechos que condicionaron la realidad de la Iglesia y de la sociedad cristiana. Esto es lo que explica en forma totalmente satisfactoria el profesor Frank en el presente volumen.