Alberto J. González Chaves, testigo presencial de los aconteciminetos que rodearon los últimos días del Papa Wojtyla: desde su aparición en la famosa ventana de la Plaza de San Pedro en su última Pascua en la tierra, hasta la muerte, entierro y clamor popular. Un clamor, que expresaba el reconocimiento de la ejemplaridad evangélica por parte del pueblo cristiano, y el inicio de una causa de canonización que todos desean que termine en la proclamación de la santidad de Juan Pablo II.