Es incuestionable la importancia que tienen las sociedades de capital en la economía contemporánea. En su estructura se integran relaciones jurídicas de diversa naturaleza, las cuales deben estar correctamente articuladas para poder desempeñar debidamente sus funciones. En esta tarea adquieren especial significación los administradores sociales. El análisis del órgano de dirección tradicionalmente se afronta desde el ámbito estricto del Derecho Mercantil; pero esta perspectiva conduce a un resultado incompleto, pues solamente atiende a una de las múltiples dimensiones que componen el ser de una sociedad. También hay que plantearse las implicaciones de otra naturaleza: las laborales, administrativas o penales. La vocación de esta obra, en consecuencia, reside en ofrecer al lector un punto de referencia para la completa comprensión de la regulación de esta figura.