Todavía hoy estamos buscando en qué consistes una buena educación. Hace más de 100 años, Dewey afirmó que educar no es adiestrar, que la transmisión de conocimientos no es comunicación, que los profesores no sólo tienen que conocer su materia sino también a sus alumnos. La revolución cpernicana que propone nos enseña que una buena escuela no es la que tiene magníficas instalaciones sino excelentes profesores.