Antes de dormir es genial que te lean un cuento, pero a veces nos asustamos con las historias que escuchamos. El lobo, la bruja, el dragón o el mismísimo hombre del saco esperan entre las páginas para asaltarnos cuando menos lo esperamos. Menos mal que mamá está atenta y cuida de que los monstruos se queden bien encerrados dentro del libro.