El monstruo del doctor Frankenstein -el más famoso, ilustrado y filmado- fue inventado en 1818 por una joven de veintitrés años, Mary Godwin Wollstonecraft, hija de un librepensador y de la fundadora del feminismo. Cuando concibió al monstruo, Mary, junto con su marido, Percy Bysshe Shelley, Lord Byron y el médico Polidori, estaba pasando unos días de ocio en un castillo del lago Leman. Los cuatro acordaron escribir allí un relato fantástico. Sólo Mary Shelley concluyó el suyo, y, aunque no fue su única obra, ha pasado por él a la historia de la literatura. Si extraordinario es el personaje, no lo es menos la autora de la biografía, Muriel Spark, considerada una de las clásicas indiscutibles de la literatura en lengua inglesa de este siglo. Spark revisa tópicos, se distancia de los clichés románticos y nos da una imagen irónica, penetrante y lúcida de esa legendaria multifacética y clarividente mujer de letras del siglo XIX.