Este ensayo histórico es una aproximación a un tipo de gente que vivía en una zona oscura de la sociedad desde antes de la Segunda Guerra Mundial, cuya existencia discurría por lugares y asuntos diferentes de los que ocupaban a la mayor parte de las personas. Habitantes de lugares de sombras y dedicados a actividades misteriosas que en los años de la Ocupación se hicieron aún más raros, más distintos de los demás, del resto de la gente con quien no compartían ni el destino ni los temores. Es lo que hicieron, cada uno a su modo, César González Ruano, Pedro Urraca, Albert Modiano y André Gabison.