Resultados de la búsqueda para: Flannery O'Connor





EL HÁBITO DE SER (O’CONNOR, FLANNERY)
El hábito de ser reúne una gran parte de las cartas que la escritora norteamericana Flannery O?Connor escribió a amigos y admiradores a lo largo de su corta vida. Flannery había nacido en Savannah (Georgia) en 1925. Después de obtener el bachillerato en artes, estudia en la Escuela para Escritores, centro perteneciente a la universidad estatal de Iowa. Durante tres años trabaja en Nueva York y Connecticut (1948-1951), pero la grave enfermedad que padece la obliga a regresar a su ciudad natal, donde vivirá con su madre y sus pavos, escribiendo relatos, novelas y conferencias hasta su muerte en 1964, cuando contaba 39 años. En la correspondencia reunida por su amiga Sally Fitzgerald en la presente antología, se avanza paulatinamente en el descubrimiento del verdadero rostro de esta escritora tan singular. La lectura de sus grandes novelas (Sangre sabia y Los profetas) o de sus colecciones de relatos (Un hombre bueno es difícil de encontrar, Las delicias del hogar, El negro artificial) producen en el lector una imagen incompleta y hasta distorsionada de su autora. Sin embargo, las cartas muestran ?casi en tiempo real? una persona a la vez serena, pausada, ingeniosa, cortés, pero también modesta, segura de sí misma, aguda, feroz en ocasiones, religiosa? y siempre orlada con esa extraña alegría de vivir que caracteriza a personas con dolencias incurables. «Teoría de la desgracia» es el título que Gustavo Martín Garzo ha elegido para el prólogo de la presente edición española. Todo un manifiesto sobre la sorprendente escritura de una mujer que experimentó el misterio de la vida y el enigma que todo hombre es.

LA BUENA GENTE DEL CAMPO (O’CONNOR, FLANNERY)
Flannery O’Connor fue una de las mejores escritoras de relatos de la literatura norteamericana del siglo XX y la crítica considera este relato, aparecido en la revista Harper’s Bazaar en 1955, como el más autobiográfico de la autora sureña. En una zona rural de Georgia, la señora Hopewell dirige su granja con la ayuda del señor y la señora Freeman. La hija de la señora Hopewell, Joy, perdió una pierna en un accidente cuando era una niña, y ahora vive en casa con su madre. Con treinta y dos años de edad, Joy tiene un doctorado en filosofía, y en un acto de rebeldía cambia su nombre por el de Hulga. Un vendedor de biblias llegará al pueblo y Hulga creerá que tiene todo bajo control y que puede seducirlo… Poco después se dará cuenta de que Mainly Pointer no es "buena gente del campo."

TIRAS CÓMICAS (O’CONNOR, FLANNERY)
Flannery O’Connor figura entre los escritores norteamericanos más importantes de la segunda mitad del siglo xx, y es famosa por cuentos como «La buena gente del campo» o la novela Sangre sabia. Menos conocida es su carrera como viñetista, desarrollada a principios de los años cuarenta, cuando su obra apareció en las publicaciones de su instituto y universidad. Muchas de sus viñetas satirizan la vida estudiantil y el impacto de la Segunda Guerra Mundial en Estados Unidos. Trabajó tanto a pluma y tinta como con linograbados, y su técnica, combinada con sus comentarios mordaces, constituye un antecedente visual de una prosa célebre por su humor y ferocidad. Comenzamos nuestra colección Nørdicacómic con Flannery O’Connor: Tiras cómicas, compilación de todas sus viñetas. Este volumen también incluye una introducción del grabador e ilustrador Barry Moser, y una perspectiva general, histórica y analítica de la intersección artística entre su literatura y sus viñetas a cargo de Kelly Gerald, especialista en O’Connor. «Flannery O’Connor: Tiras cómicas tiene todo el encanto esperable de una joven e ingeniosa O’Connor. Pero es más que un simple libro cómico. Permite comprender la vida personal de O’Connor, así como su burla de las pretensiones de su entorno social.» Vanna Lee, Forbes

CUENTOS COMPLETOS (O’CONNOR, FLANNERY)
En este volumen se reúnen todos los relatos de Flannery O'Connor, tanto los que publicó en vida como los que dejó inéditos, muchos de los cuales nunca se habían traducido al castellano. El genio lúcido, doloroso y atormentado de Flannery O'Connor alcanza sus más altas cimas en el cuento, género que cultivó ininterrumpidamente desde sus años de estudiante hasta su prematura y trágica muerte. Las historias de este libro hiriente y sobrecogedor tienen como escenario los pueblos y las tierras del sur de Estados Unidos, especialmente su Georgia natal, un mundo decrépito y en ruinas cuyo secular abandono y pobreza ancestral aparecen marcados por la violencia y el odio. Pero, más allá de la sordidez, los conflictos raciales, el asfixiante peso de la religión y la frustrada lucha por la libertad, hay siempre en los cuentos de Flannery O'Connor una extraña belleza, una íntima exposición moral de la condición humana que trasciende la anécdota. Comparada a menudo con William Faulkner o Carson McCullers, con quienes forjó lo que se ha llamado el «gótico sureño», Flannery O'Connor es una de las narradoras imprescindibles de la literatura norteamericana del siglo XX. Reseñas:«Flannery O'Connor deja al lector paralizado, conmovido y profundamente impresionado por un talento literario de una singularidad y grandeza únicas.»Sunday Telegraph «Sus cuentos son duros, imaginativos, están vivos.»The Observer «No fue solo la mejor escritora de su época y país: expresó algo secreto sobre el sur de los Estados Unidos, con ese talento extraordinario para mostrar el espíritu real de una cultura. Fue una genia.»The New York Times «Una artista incomparable que escribió algunos de los mejores relatos en nuestro idioma.»Newsweek «Una colección magnífica de una gran escritora.»Hermione Lee, The Independent «Un corpus magistral, una de las cimas de la literatura del siglo XX.»Juan Manuel de Prada, ABC «Hay un antes y un después de leer a Flannery O'Connor.»Carolina Esses, La Nación «La obra de Flannery O'Connor constituye una de esas felices rarezas literarias que hará las delicias de quienes la frecuenten.»Miguel Lorenci, La Voz de Galicia «Flannery O'Connor tendía a volver una y otra vez sobre las mismas situaciones sin perder su capacidad de sorprender. En su trabajo hay patrones recurrentes, pero siempre se las arregla para que parezcan nuevos.»Tobias Wolff «Una de las escritoras más sorprendentes y con más talento que han salido del sur de los Estados Unidos.»V. S. Pritchett «O'Connor enfrenta a los lectores a situaciones intrascendentes a primera vista, pero que terminan mostrando la complejidad de lo más nimio y, por ende, resultando grotescas.»José Antonio Gurpegui, El Cultural «Cuando leo a Flannery O'Connor, no pienso en Hemingway, en Katherine Anne Porter o Sartre sino en alguien como Sófocles. ¿Qué más puedes decir de un escritor? Escribo su nombre con honor, por toda la verdad y destreza con que muestra la caída de un hombre y su deshonra.»Thomas Merton «Con una agudeza que aún hoy desconcierta, los escenarios de O'Connor están llenos de una malignidad absurda y casi juguetona. Una mirada profunda hacia el núcleo de lo grotesco en medio de lo cotidiano.»Aglaia Berlutti, Eñes «En pocos escritores encuentra uno la perfección con que ella articula, valiéndose de tramas impecablemente estructuradas, esos desenlaces imprecisos, provocadores y provocados por sus desencadenantes psicológicos y espaciales.»Raymundo Gomezcásseres, El Espectador (Colombia) «Quien lea un sólo cuento de Flannery O'Connor vivirá una transformación instantánea en el rostro. Le achinará los ojos, le suavizará la piel, le elevará las cejas y empezará a mover inconscientemente los labios siguiendo el relato. Al final, la lengua se tropezará con los dientes y entonces saldrá un ruido, pero será difícil de identificar. Parecerá una carcajada, pero no. Parecerá un grito de terror, pero tampoco. Parecerá el ruido sin sentido de una histeria, pero todavía menos. Parecerá la voz que hay detrás de nuestra propia conciencia, y eso parecerá más acertado. Es la música de los cuentos de la escritora estadounidense, una música única, especial, reveladora y que la convierte, sin duda, en la mejor escritora del siglo XX junto a Eudora Welty. [...] El lector primero se sorprende, luego se ríe, después siente un estremecimiento y al final uno se siente agotado, confuso, pero lleno de un extraño vigor.»Carlos Sala, La Razón