En los cuentos de Millás, una puerta es un umbral a otra realidad. La fantasía se camufla en la cotidianidad y el lector, confiado, salta a pies juntillas a un mundo con leyes propias, a un juego tan absurdo como efectivo. Con cada uno de estos relatos el lector se sumerge, poco a poco, en el imaginario de Juan José Millás. Primavera de luto es un camino recién regado: el verdadero gozo está en saltar de charco en charco, empaparse de los sueños y recoger las flores de los márgenes.