Cansada del trabajo periodístico pero necesitada de dinero, como con franqueza reconocía, Clarice Lispector acepta escribir crónicas para el Jornal do Brasil. Lo hace durante siete años, entre 1967 y 1973. Imprevistas y fascinantes, las crónicas de Descubrimiento de un mundo, publicadas por primera vez en español, atrapan a la escritora como personaje.