Tango ha conseguido unas salchichas para chuparse los dedos y, como no tiene mucha hambre, decide esconderlas para saborearlasmás tarde. Pero su idea le va a dar muchos quebraderos de cabeza. ¡Apenas encuentra un escondite y se cruza conalguien que aparece por ahí! ¿Podrá Tango, al fin, probar estas sabrosas salchichas?