Algunos dicen: «La Semana Santa de ahora ya no es como la de antes. Se ha profanado todo. Se ha diluido todo. La mayoría de mis amigos aprovechan estos días para irse de vacaciones. Uno termina pensando si esto de ser cristiano no será ser un bicho raro». Yo quisiera deciros que no os dejéis contagiar por el pesimismo. Seguro que en su balance de Semana Santa, él no va a contar el número de personas que desfilaron en las procesiones, sino el número de creyentes que le acompañaron desde el corazón.Aquí se recogen las celebraciones de la Semana Santa y de los domingos del tiempo de Pascua.