Al estallar la Segunda Guerra Mundial, Willy Peter Reese tiene veinte años y es un muchacho sensible que trabaja como aprendiz en un banco. La literatura, la poesía, la música y el amor son sus grandes pasiones. Meses después, alistado en la Wehrmacht (el ejército regular alemán) será protagonista, en primera línea de fuego, de la ofensiva sobre el frente ruso. Su trágica experiencia -la condición humana llevada al extremo del horror-, las penalidades de la guerra, el miedo y las atrocidades cometidas por sus compañeros de armas, llevará a Reese, una mente literaria y atormentada, a reflexionar sobre el pacifismo y el sentido de la aventura y el combate, la existencia y el mal, en un «diario de campaña» y en la correspondencia que mantuvo con su familia y amigos. Partiendo de estos textos, el propio Reese, convaleciente de una herida y al calor del hogar, escribirá -a principios de 1944- este estremecedor relato. Síntesis de testimonio histórico y de obra literaria, Un extraño para mí mismo es un libro fundamental -lírico, ardiente y desesperado- para conocer el otro lado de la contienda gracias a la mirada de un joven alemán. Reflejo de los primeros fervientes ideales y de la desesperación ante la inminente derrota, el texto de Reese es un descenso a los infiernos de un hombre cuya vida cambió por el empuje del nazismo y la guerra.