Este libro trata sobre cómo la ética afecta, y se ve afectada, por el cambiante e inasible mundo de los datos. Sirviéndose de voces autorizadas por la academia, de asociaciones profesionales y de instituciones públicas, norteamericanas y europeas, la autora perfila el escenario que emerge del uso de la internet de las cosas para la obtención de datos masivos; identifica los principales problemas que atañen a su almacenamiento, procesamiento y utilización; y aporta sugerencias sobre cómo puede contribuir la ética a gestionar estos procesos de un modo orientado hacia el bien común.