Lúcida y premonitoria en Vivos y muertos Vázquez-Figueroa demuestra conocer a fondo los entresijos de las tramas de corrupción capaces de anteponer sus propios intereses incluso a la seguridad y hasta la vida de los futuros pasajeros. Aquiles Troyano es un ingeniero de caminos que ocupa un puesto de responsabilidad en la Administración del Estado y que se ve envuelto en una investigación para denunciar un caso de corrupción dentro de su propio ministerio, como consecuencia del cual se producen hundimientos y accidentes en la construcción del Tren de Alta Velocidad.