Gerald Durrell fue cultivador asiduo del relato corto, género en que campa a sus anchas su inconfundible sentido del humor. Buena muestra de ello la constituyen las seis piezas reunidas en FILETES DE LENGUADO, donde hallamos, entre otros, un nuevo y regocijante episodio de la familia Durrell y sus «otros animales» en Corfú ­«La fiesta de cumpleaños»­, la accidentada secuencia de nervios y peripecias que desencadena en la exigua colonia blanca de una ciudad del antiguo Camerún bajo tutela británica la inesperada visita de un alto funcionario ­«Una cuestión de ascenso»­, un incidente médico que desata esa carcajada incontenible que suele provocar el descalabro ajeno ­«Una cuestión de títulos»­, o el relato que narra la entrada en la vida del autor de un personaje ­«Ursula»­ que el lector de «Un novio para mamá y otros relatos» (BA 0504) recordará, sin duda, de forma inmediata.