Huir de las ocasiones

Atrapada por su frigorífico

Quién no tiene por costumbre hacer la visita al frigorífico. Aunque sea para mirarlo o para ver si algo apetece. Un frigorífico atrapó a una noruega de 23 años el pasado fin de semana al meter una cubitera en el congelador y pegársele la mano a la superficie metálica del mismo. «Cuando conseguí liberar la mano me entró pánico», dijo la joven Lene Mari Steinshamn, que tiene tres dedos vendados con heridas graves por congelación según el diagnóstico médico.

La mujer, sola en su domicilio, pensó en desenchufar el congelador pero optó por rociar detergente sobre la mano atrapada y finalmente, en medio de grandes dolores, logró liberarse.

En urgencias, los médicos, entre risas, le trataron las heridas. «Fue la primera vez que habían tenido un caso similar», dijo Lene, según informa este lunes la edición digital del diario Bergens Tidende.

Libertad digital
16.1.2006