La cultura occidental se ha ido centrando sobre todo en los aspectos racionales y científicos, en la técnica y la conquista del mundo exterior. Sin embargo, el corazón tiene sus razones que la razón no puede entender. Cuando las imágenes arquetípicas presentes en los cuentos tocan el alma, la despiertan, orientan e iluminan. Se podría decir, pues, que en los cuentos se revela la "luz del alma". Quienes los escuchan se sienten extrañamente tocados en el corazón y encuentran ayuda para caminar por la vida con hondura humana.