De la noche a la mañana, y sin comerlo ni beberlo, Joe Perkins, un chico normal y corriente, acaba convertido en el primer ministro de su país. A Joe le toca mandar, así que se pone a ello y decreta que los trenes lleven piscina, que todo el mundo se divierta, que haya un día dedicado al helado, que los gatos lleven zapatos... Pero en el mundo de la política hay muchos enemigos, y Joe tiene el suyo, por supuesto. ¿Será capaz de enfrentarse a él y derrotarlo?